Ermita de San Bernardo.



Altar mayor



El altar mayor está dedicado al tema de la “lactatio Bernardi”, es decir, al momento en que la Virgen María da la leche de su pecho a Bernardo para concederle el don de  la sabiduría y de la elocuencia. Es una clara evocación de los cultos a la Madre Tierra: por extensión, podemos entender que trata de la relación entre el Hombre y la Madre Tierra en el terreno del conocimiento.

En el centro del altar, la Virgen dando la leche a Bernardo de Claravall, que está de rodillas debajo de ella. A los lados las imágenes de dos mujeres provistas de libros (mujeres sabias) y en distintas posturas.

La transmisión de la leche de la Virgen a Bernardo, conocida como la “lactatio Bernardi”, se cuenta por primera vez en una obra francesa del siglo XIV, que nos dice que Bernardo tenía que predicar siendo muy joven y la Virgen se le apareció en sueños dándole su leche, con lo que el monje alcanzó el don de la elocuencia y la sabiduría. Las Cantigas de Santa María, de Alfonso X el Sabio recogen el milagro de un monje que resucita (adquiere una nueva vida) cuando la Virgen le da su leche, «narrando el prodigio de la resurrección de un monje cisterciense, que obró la Virgen dándole leche de su seno». También se menciona este tipo de milagro en el Cancionero de Úbeda (1558).

Desde el siglo XIII, varios cuadros españoles tienen como tema la “lactatio Bernardi”: el cuadro de Juan Correa de 1545, el de Alfonso Cano de 1646, un cuadro de Murillo de 1660, el Retablo de San Bernardo de la Capilla de los Templarios de Palma, un cuadro de Juan Carreño en Pastrana de 1668…

  


La Virgen dando de la leche de la sabiduría a Bernardo de Claravall. Sin embargo, no dirige su mirada hacia Bernardo, sino hacia su hijo o hacia los ángeles que lo acompañan.


 Un primer plano de la Virgen. Sostiene al Niño Jesús y a su lado aparecen 2 ángeles. "El pecho izquierdo representa el aspecto más emocional, más afectivo de la faceta maternal y las emociones inhibidas en la mujer (el papel de mujer y la madre en ella), y los sentimientos interiores que la mujer vive con relación a cada uno de ambos papeles. En cambio el pecho derecho se asocia al papel y a las responsabilidades de la mujer en la familia o en la sociedad, representa la mujer responsable y lo que se espera de ella hacia el “exterior”.(Cristina López, Ermita de Torre de Arcas)


Bernardo de Claravall recibiendo la leche de la sabiduría. A su izquierda aparecen dos figuras y a su derecha, un ángel.


Imagen de la mujer sabia, con libro abierto (con conocimientos accesibles a todo el mundo), a la izquierda del altar. Hace con la mano derecha una figura de yoga (meditación), mientras una paloma (simbolizando la sabiduría) descansa en su hombro. La figura de yoga es el Mudra Chin o mudra del conocimiento.

“Este mudra tiene propiedades en los tres planos.
“1. En el plano emocional: ayuda en el flujo de energía corporal para que circule equilibradamente, siendo útil así en enfermedades como los estados depresivos o eufóricos.
“2. En el plano mental: fortalece la memoria y estimula la inteligencia. Ayuda a que el cerebro trabaje correctamente.
"3. En el plano espiritual: según el hatha yoga, este mudra es tan potente espiritualmente que permite al practicante constante unir su alma al alma de Dios. Esto significa que con este mudra se puede alcanzar la iluminación o despertar de la conciencia." (Cristina López, Ermita de Torre las Arcas)

La paloma es el símbolo del espíritu vital, la inocencia y la paz. Es el Espíritu Santo para los católicos. También simboliza a los Caballeros del Grial. La paloma, "además de participar del poder simbólico general de todos los animales alados –espiritualidad y poder sublimación-, constituye, desde los tiempos de Noé, la esencia cósmica de la paz, armonía, esperanza y felicidad reencontrada entre todos los seres (…). Si la paloma es de plumaje blanco, debemos añadir otros conceptos, igualmente importantes, para el equilibrio de la comunidad, como son el candor y la pureza. (…) Otro simbolismo asociado a la paloma, igualmente extendido desde tiempos inmemoriales, es el del amor: el amor puro y limpio.” (Jesús Ávila Granados, La mitología cátara, ed. Martinez Roca)

“Las figuras de un santo, un monje o incluso la de una mujer que lleva entre sus manos un libro abierto significa lo revelado, la inspiración divina en este libro arquetípico. Pero en otras ocasiones, simbolizarán que dichas figuras se encuentran en un lugar especialmente favorable para adquirir conocimientos. Si además estas imágenes se repiten pero ahora el libro permanece cerrado, entonces será señal de que la importancia del  mensaje deberá permanecer secreta, personal e intransferible.” (Xavier Musquera, Un viaje por la historia de los templarios en España, ed. Santos Rodriguez)




Imagen de la mujer sabia, con libro cerrado (con conocimientos que sólo unos pocos pueden conocer), a la derecha del altar. Lleva un báculo en su mano derecha y un corazón esculpido en el pecho. Las dos mujeres “que llevan un libro, lo llevan en su mano izquierda, el lado del corazón. Podría tener que ver con el 2º Rayo esotérico de Amor-Sabiduría, (ambos conceptos pertenecen al mismo tipo de energía). En la mujer que hay en el lado derecho del altar según se mira, queda muy marcado el corazón sobre ella, para recalcar que ella representa el aspecto “Amor” del 2º rayo y la mujer de la izquierda representaría más el aspecto “sabiduría” de esa misma energía.” (Cristina López, Ermita de Torre las Arcas)