Románico del Valle de Yerri, Navarra



Otras iglesias





Garisoaín

De la iglesia románica han quedado las arquivoltas, capiteles de decoración vegetal y el ajedrezado jaqués. Su construcción data del siglo XII.


La iglesia de Garisoaín. 
Foto: turismo.navarra.com


El interior de la iglesia guarda una serie de esculturas y cinco retablos de gran calidad de los siglos XVI y XVII, obra de los Imberto de Estella. Se cuenta que el párroco local, Juan de Salinas, casó a su sobrino con Catalina de Imberto, hija del fundador de la dinastía en Estella, y de ahí que los artistas de esta familia dejasen su huella en la Natividad de Nuestra Señora. Como fuese que un incendio destruyó prácticamente la iglesia románica en el siglo XVI, Bernabé Imberto -el mejor tallista navarro de su época- dedicó sus mejores esfuerzos a decorar el templo reconstruido. El retablo mayor está dedicado a la Natividad de la Virgen, mientras que los otros cuatro  se dedicaron a varios santos. Las obras de restauración y decoración fueron pagadas por los vecinos del pueblo.


El retablo central, del siglo XVI, obra de Bernabé Imberto, el mejor tallista navarro de su época.
Foto: enciclopedianavarra.com

También encontraremos algunas sepulturas en el interior del templo. En 1598 se destinó una zona para enterramiento, previo pago de las tasas correspondientes.

La leyenda nos dice que en 1172 el rey Sancho el Sabio de Navarra donó a una criada llamada María González la totalidad del pueblo de Garisoaín (casas, tierras, iglesias y ermitas). María González, no pudiendo mantener tales posesiones, las cedió a un clérigo de Puente la Reina.


Otro retablo de los Imberto, siglo XVI.
Foto: enciclopedianavarra.com








Lácar, ermita de Santa Engracia



Sufrió grandes modificaciones en el siglo XIX. Del Románico conserva el ábside y las arquivoltas de la portada.


La iglesia de Nácar






Zurucuaín, iglesia de la Purificación de Nuestra Señora.


La iglesia data del siglo XIII y fue reformada en el siglo XVII. Se puede calificar de protogótica. 

En el interior encontraremos un retablo de estilo rococó con tallas que van del Renacimiento hasta épocas recientes. La talla de la Virgen es de finales del siglo XIII ó comienzos del XIV.

La orientación del templo es de 90º, es decir, a la salida del sol en los equinoccios y con posibles efectos lumínicos en el solsticio de verano.


La iglesia de Zurucuaín



Capiteles de la portada



Crismón