Románico del Alt Empordà, Girona



Sant Miquel de Fluvià, un poco de Historia: el abad Oliba bendijo el lugar

Se documenta por primera vez en 1011, en una bula del papa Sergio IV. Entonces era propiedad del monasterio de Sant Miquel de Cuixá y tenía una iglesia. La bendición del lugar se hizo en 1045, como sitio de ubicación del monasterio a construir. Participaron en esta bendición el abad Oliba, obispo y abad de Cuixà, el arzobispo de Narbona, el obispo de Girona y los condes Ponç d'Empúries y Gausfred de Rosselló.



Sant Miquel de Fluvià es un monasterio del siglo XI


Hasta la consagración de la iglesia en 1066 se produjeron varias interrupciones en las obras. Guillem de Fonolleres interpuso un litigio alegando que estas tierras habían sido cedidas a su padre por el conde Gausfred. El litigio no prosperó y el fallo fue favorable al monasterio de Cuixà. Finalmente, el obispo de Girona, Berenguer Guifré, consagró el templo; asistieron al acto Guifré, arzobispo de Narbona, y los obispos Guillermo de Osona, Berenguer de Barcelona, Guillem de Urgell y Ramon de Elna.

Cartel informativo (trad. del catalán): "Al principio la iglesia de Sant Miquel de Fluvià fue una posesión de la abadía de Sant Miquel de Cuixà, en el Conflent. A mediados del siglo XI se erigió en monasterio independiente y en el 1066 se consagró la iglesia".

Pronto alcanzó el monasterio un gran poder económico. Se benefició de las donaciones de los conde de Empúries, de Barcelona y de los señores de Oltrera, en el Rosellón.

A partir del siglo XIV Sant Miquel de Fluvià entró en decadencia. Eran años de crisis económica y conflictos armados. Por eso el papa puso al monasterio bajo la dependencia de Sant Pere de Galligants, de Girona, lo que sin embargo no se hizo efectivo hasta 1613. Cuando llegó la Desamortización de 1835 ya no residía ningún monje desde hacía años.

Cartel informativo (trad. del catalán): "El monasterio, de reducida entidad, fue anexado a Sant Pere de Galligants de Girona y subsistió como dependencia suya hasta 1835. Entonces el templo adquirió carácter de parroquia."


Plano del monasterio (foto: cartel informativo)




El templo: un edificio románico fortificado en el siglo XV

La iglesia es de planta basilical con transepto y cabecera de tres ábsides. Destacan los capiteles del interior y una imagen gótica de la Virgen. El edificio fue fortificado a raíz de la Guerra Civil catalana del siglo XV: se construyeron almenas y matacanes y una torre sobre el ábside principal.


Interior del templo. El edificio fue fortificado en el siglo XV (foto: monestirs.cat)


Cartel informativo (trad. del catalán): "El templo es románico, data de finales del siglo XI y está dispuesto en tres naves donde destacan los capiteles de los pilares en las columnas. En el siglo XV fue fortificado y el portal principal gótico data del 1532. Al sur de las excavaciones arqueológicas se han puesto al descubierto los vestigios de las dependencias monásticas alrededor de un desaparecido claustro románico, ahora recuperado."

El templo recoge las características del románico de la zona, influenciado por el románico lombardo que en ese momento comenzaba a introducirse en Catalunya.

La portada.- Data de las reformas del 1532. Una lápida sepulcral se encuentra junto a la puerta y lleva la fecha de 1258.


Imagen gótica de la Virgen y el Niño. (foto: monestirs.cat)


El claustro.- Poco queda del claustro y de las dependencias monacales. Fueron destruidos en el siglo XV, a raíz de la fortificación del templo y la construcción de un foso alrededor del mismo. Siglos después, esta zona se vendería y pasaría a ser un huerto.

El campanario.- Concebido como torre exenta cuadrangular. Quedó a unos centímetros del templo cuando se construyeron unos muros. Data del siglo XII, posterior a la iglesia. Está formado por tres pisos sobre un zócalo; cuando el edificio se fortificó se añadió un piso más. Alguna decoración a base de capiteles con pequeñas figuras de cabezas, flores y motivos geométricos.

Decoración del ábside.- Los motivos son varios: geométricos y dos pájaros bebiendo de una copa. El friso del ábside tiene arcos ciegos lombardos con ménsulas con cabezas humanas y, en el centro, una cabeza de oso.

La orientación del templo es de 115º aproximadamente, es decir, prácticamente a la salida del sol en el solsticio de invierno (21 de diciembre). Posibles efectos lumínicos en el solsticio de  verano (21 de junio) y en los equinoccios (21 de marzo y 23 de septiembre).



Capiteles del interior

Columnas de los arcos torales.- Capitel con decoración vegetal y hojas saliendo de  la boca de tres cabezas de animal. Otro capitel con ocho pequeños arcos con una hoja en forma de lanza en el interior; un personaje con el cuerpo curvado y cabeza en horizontal, tiene una vara en su mano derecha y está cogiendo vegetales con su mano izquierda. A su lado, un perro mirando hacia atrás. Otros dos personajes llevan una muleta. Se piensa que estos personajes representan monjes.

Un nuevo capitel en el otro arco tiene decoración vegetal, bolas, motivos geométricos y un entrelazado arábigo.

Transepto.- Cuatro capiteles. En dos de ellos, encontramos motivos vegetales y un personaje con los brazos levantados.



  Capiteles del interior (foto: monestirs.cat)