Catedral de Huesca. El templo

Románico de Huesca capital


Catedral. El templo


El templo es de planta de cruz latina, tres naves, crucero y capillas laterales. 

Durante 200 años se utilizó la mezquita musulmana como lugar de culto cristiano. Únicamente, como construcción cristiana, en esta zona en el siglo XII se había levantado la pequeña iglesia románica de Santa María de los Gozos. De esta iglesia queda un pórtico con tres arquivoltas.

Con Jaime I (1213-1276), en 1273, se tomó la decisión de construir una catedral. Entonces era obispo de Huesca un sobrino del monarca, Jaime Sarroca, y este sería uno de los motivos de que se tomara tal decisión. La ciudad contaba entonces con 8.000 habitantes, que fue el máximo de población en toda la Edad Media.


Interior de la catedral. Se construyó sobre la mezquita mayor de Huesca.


La catedral de Huesca se construiría, pues, en estilo gótico. Las fechas de su construcción explican que Huesca no cuente con una catedral románica, como sería lo normal dada la abundancia e importancia del románico en la provincia, en donde podemos contar con la presencia de dos magníficas catedrales románicas como son la de Jaca y la de Roda de Isábena. "Recién consagrado obispo de Huesca el sobrino de Jaime I: Jaime Sarroca, el rey juzgó indecorosa la celebración del culto cristiano en la mezquita aljama, por lo que en 1273, propuso la construcción de una nueva Catedral, asignando a este fin los primeros recursos económicos. Diversos litigios demoraron el comienzo de las obras hasta 1294" ("Huesca, Historia de una Ciudad: La Iglesia, la Cultura y el Arte medievales en Huesca.- A. Durán Gudiol", citado por A.García Omedes) .

Las obras se terminaron a principios del siglo XVI, más de 200 años después de su inicio. De la mezquita musulmana sólo queda un arco de herradura en la zona de los claustros. El proyecto inicial era de un templo de tres naves y cinco capillas en la cabecera y en el transepto. En la primera mitad del siglo XIV se construyeron la cabecera con cinco ábsides, el muro norte del crucero, las naves laterales y la cubierta. En la segunda mitad del siglo XIV y hasta la primera mitad del XV se construyeron la torre y se inicio el claustro que sustituiría al claustro románico; el claustro quedaría inacabado. A finales del siglo XV y hasta 1511 se harían las obras de recrecimiento de los muros de transepto, ábsides y nave central.

La orientación del templo es de 87º, es decir, prácticamente a la salida del sol en los equinoccios. Posibles efectos lumínicos en el solsticio de verano y en los equinoccios.




Retablo de Damià Forment

Damià Forment fue el escultor más importante de la Corona de Aragón en su época. Aunque nunca visió Italia supo captar las corrientes de los nuevos tiempos a partir de reproducciones y grabados.

En el contrato para realizar este retablo, fechado en 1520, se estipula que ha de seguir las pautas del retablo mayor de la basílica del Pilar de Zaragoza. También, que en su estilo se conciliaría  “lo romano o ytaliano” y “lo flamenco”: un gótico que recogiera las nuevas influencias del Renacimiento italiano y las corrientes flamencas. El precio se fijó en 110.000 sueldos jaqueses (equivalentes a 5.000 ducados de oro). El plazo de ejecución se fijó en 3 años, pero la obra no se acabó hasta 14 años después, en 1534. La dilación en la ejecución de la obra provocó un retardo en el pago de los honorarios y los pleitos consiguientes; cuando Forment murió en 1549 todavía no había cobrado la totalidad de la obra que, finalmente, sería abonada a sus hijas.


El retablo de la catedral de Huesca es una de las obras más importantes de Damià Forment, el escultor más prestigioso de la España de su tiempo.


El retablo representa la Pasión de Cristo -un tema muy habitual en los retablos de esta época- y pasajes del Antiguo Testamento. La Pasión aparecen en tres grandes escenas, de izquierda a derecha: Camino del Calvario, Crucifixión y Descendimiento. El Descendimiento está inspirado en el grabado de Marco Antonio Raimondi, que se inspiró en una obra de Rafael. También se nota la influencia de los grabados de Durero.

 Una serie de santos y apóstoles están sentados (Pablo, Pedro, Vicente...): “dichas imágenes an de estar asentadas porque no pueden estar de pies porque el lugar no lo sufre”. La representación de los apóstoles es de una gran belleza. Varios relieves representan diversos momentos de la Pasión de Cristo, desde la Última Cena hasta Jesús ante Pilatos. En el sotabanco aparecen los retratos del artista y de su hija Úrsula.

El retablo de Huesca supera al retablo del Pilar de Zaragoza, del mismo autor. Sin duda, es una de las obras más importantes de Forment. 


El retablo representa la Pasión de Cristo -un tema muy habitual en los retablos de esta época- y pasajes del Antiguo Testamento.



Portada principal

Data del 1539. Es una muestra sobresaliente de escultura gótica. En el tímpano aparecen en su parte central la Virgen y el Niño, rodeados de dos ángeles, los Reyes Magos a la derecha y un 'Noli me tangere' ("no me retengas", Jesús resucitado dirigiéndose a María Magdalena) a la izquierda. Tiene siete arquivoltas y 16 esculturas de tamaño natural, en alusión numerológica al 7 y al 8 (16 = 8*2). El número 7 simboliza la perfección. Dios creó el mundo en 7 días, los 7 pecados capitales, los 7 dolores y gozos de la Virgen, los 7 sacramentos, etc. Muy presente en el Apocalipsis: las 7 iglesias de Asia, las 7 trompetas, los 7 cuernos, los 7 cielos, etc. Salomón dice que la sabiduría reside en una casa que se sostiene sobre 7 columnas, evocación de las 7 dimensiones de lo celeste o lo inferior. El número 8, como número engendrado por la rotación de dos cuadrados buscando formar el círculo (la cuadratura del círculo) representa también la perfección. El octógono es la figura geométrica de los templarios y es también muy habitual en la iconografía china.

Otra puerta se abre en el lado de la Epístola; su decoración es escasa y tiene restos de policromía.



La portada de la catedral es una muestra sobresaliente de escultura gótica



En el dintel de la portada, en la parte central inferior, una mujer en la que dos serpientes maman de sus pechos. La interpretación ortodoxa diría que se trata de representar el castigo por el pecado de lujuria. Otra manera de verlo es que en las culturas antiguas la lactancia de la Diosa es la forma en que ella nos transmite su sabiduría y que las serpientes son los animales emisarios de la divinidad, porque viven bajo tierra (en el seno de la Madre Tierra) y porque, al mudar su piel, nunca mueren, son eternas.



En el tímpano aparecen en su parte central la Virgen y el Niño, rodeados de dos ángeles, los Reyes Magos a la derecha y un 'Noli me tangere' ("no me retengas", Jesús resucitado dirigiéndose a María Magdalena) a la izquierda. 



Personajes de la portada. En total habría 16 personajes, 8 a cada lado. El número 8, como número engendrado por la rotación de dos cuadrados buscando formar el círculo (la cuadratura del círculo) representa también la perfección.




Figuras de las 7 arquivoltas. El número 7 simboliza la perfección. Dios creó el mundo en 7 días, los 7 pecados capitales, los 7 dolores y gozos de la Virgen, los 7 sacramentos, etc. 




Torre campanario y chapitel

La Torre se construyó entre 1369 y 1423, rematada por un chapitel. Este chapitel desapareció en 1937, tras un accidente, y no se ha vuelto a reponer.



La Torre se construyó entre 1369 y 1423




Claustro

Aún quedan restos del primitivo claustro románico adosado al lado norte del templo. El claustro actual, gótico, fue edificado en tiempos del Papa Luna.



Pinturas de San Andrés de Yaso

Pintura de Cristo, con un libro y haciendo un 'mudra' con al mano derecha. A su alrededor, los cuatro evangelistas, de los que sólo se conserva san Lucas (toro alado). Son antecedentes del tetramorfos los cuatro hijos de Horus, representados también por tres animales (chacal, mono y halcón) y un hombre y también relacionados con los puntos cardinales. Los hijos de Horus custodian el alma de este dios, lo mismo que el tetramoros rodea a Cristo. Tenían la función de guardar las vísceras del personaje que estaba siendo embalsamado, así como de colaborar con Osiris en el pesaje de las almas.


Jesucristo con un libro abierto, que contiene verdades que se pueden conocer.


Milagro de san Andrés. Se cuenta que 40 hombres iban en barco a escuchar la palabra de san Andrés, pero el demonio desató una tremenda tempestad y todos murieron ahogados. Cuando sus cuerpos aparecieron en la playa, san Andrés los resucitó. La pintura nos presenta a san Andrés y tres de los ahogados.



San Andrés resucita a los ahogados.


Interrogatorio de san Andrés. El santo es interrogado por el procónsul Egeo quien le ordena que haga sacrificios a los dioses paganos; como se niega, es condenado a morir crucificado. La pintura está en muy mal estado.

San Andrés conducido a prisión.




Arquetas

De las tres arquetas que se conservan en esta catedral, destaca una de ellas especialmente. Representa en la cara anterior el Calvario, con el sol y la luna en la parte superior. "De forma rectangular y cubierta a doble vertiente sobre soportes del mismo material. Se encuentra esmaltada en todos sus frentes sobre placa de cobre sobredorada, por el sistema de "excavado", "campeado" o "champlevé". En la cara anterior se representa, sobre fondo vermiculado la escena del Calvario; Cristo en la Cruz, acompañado de María y Juan, en actitudes doloridas En la parte superior de la cruz, la personificación del sol y la luna formando "pendant". Cuatro figuras apostólicas dos a dos, cobijadas por arquitectura de tradición románica, flanquean la composición. En la cubierta, también en fondo vermicular una Epifanía. En los costados, los apóstoles Pedro y Pablo, identificables por sus atributos. La parte posterior del arca se decora con motivos de rosetas tetrapétalas inscritos en círculos tangentes. (...) El origen de su fabricación: estilísticamente coincide con los tipos creados en talleres franceses de Limoges y de Conques, propagados a través de los artistas itinerantes que cruzaban el Pirineo en época románica." (Catálogo del Museo Episcopal y Capitular de Huesca, citado por A.García Omedes)

La arqueta representa en la cara anterior el Calvario, con el sol y la luna en la parte superior.