Románico de Huesca capital. San Pedro el Viejo. Historia




San Pedro el Viejo. Historia

San Pedro el Viejo es un edificio románico del siglo XII, uno de los conjuntos religiosos más importantes del románico español. Se levanta sobre otros templos de culturas anteriores, de época  romana y visigoda.

Portada de San Pedro el Viejo. El templo se levanta sobre otros templos de culturas anteriores, de época  romana y visigoda.


Como iglesia visigoda, permaneció inalterable a la llegada de los musulmanes y por ello es uno de los templos más antiguos del país. Fue la iglesia que los musulmanes permitieron que siguiera para el culto de los cristianos de Huesca, pues estaba ubicada, además, en el barrio donde residían los que profesaban esta religión Este barrio se llegó a conocer como el "barrio de los mozárabes" (mozárabe: las personas cristianas que vivían en territorio musulmán). Según la bula del papa Pascual II, de 25-Mayo-1107. "la antigua iglesia de San Pedro con su cementerio, era la única que había subsistido en la ciudad de Huesca, habiendo dispuesto de ella los cristianos durante la dominación musulmana" (Durán Gudiol. Iglesias y Procesiones. 1994, citado por A.García Omedes).

Con la conquista cristiana en 1096, la iglesia de San Pedro vió añadido a su nombre el calificativo de "el Viejo", ya que no era un edificio de nueva construcción sino que venía de los tiempos de los visigodos, varios siglos atrás.

San Pedro el Viejo pasó a depender de los benedictinos, quienes reformaron el edifico en estilo románico, tal como ha llegado a nuestros días. El nuevo templo se empezó a construir en el 1117, con Alfonso I el Batallador. A finales del siglo XII ya se habían terminado las obras, aunque hubo algunas reformas posteriores.

El interior guarda una serie de pinturas en la zona cercana al coro. San Pedro el Viejo fue la iglesia que los musulmanes permitieron que siguiera para el culto de los cristianos de Huesca,


Fernando el Católico, siglo XV, secularizó el monasterio, con lo que comenzó una etapa de decadencia. En el siglo XIX el edificio, prácticamente abandonado, amenazaba ruina.

Cartel informativo: "En este lugar, según es tradición, hubo un antiguo templo, que congregó a la comunidad cristiana durante la época árabe. Con la reconquista de la ciudad, en 1096, el rey Pedro I la entregó a los monjes benedictinos de San Ponce de Tomeras (Francia) que fundaron junto a ella un priorato.

"El edificio de la nueva iglesia fue construido a partir de 1117, y a finales del siglo XII, el bello claustro con capiteles historiados del mejor arte románico aragonés. En el siglo siguiente fue construido el cimborrio y la torre, actualmente desmochada, que en su interior cobija la capilla de San Ponce, en un espacio de buena arquitectura medieval."

En el claustro encontraremos la icónica imagen la bailarina




San Pedro el Viejo y el Grial

La leyenda del Grial pasa por San Pedro el Viejo. Se cuenta que san Lorenzo, siglo III, envió el cáliz desde Roma a Huesca, pues en Italia corría peligro debido a las persecuciones de que era objeto el cristianismo. EN época vsigoda, el santo cáliz quedó depositado en San Pedro el Viejo para, posteriormente, con la llegada de los musulmanes, ser trasladado al Norte, donde acabaría en San Juan de la Peña.

La leyenda del Grial se activó en Europa con la caída de Jerusalén en el siglo XII. Se trataba de poner en pie una leyenda con un fuerte contenido ideológico y religioso que permitiera desviar la atención de la terrible derrota que había sufrido el feudalismo europeo en Oriente Medio.