Santa Maria del Mar


Un poco de Historia


ORIGEN EN ÉPOCA DEL IMPERIO ROMANO. La Basílica de Santa María del Mar fue construida entre 1329 y 1389, y consagrada 5 años antes de terminadas las obras. 

En esta zona, la primitiva comunidad cristiana barcelonesa construyó una necrópolis donde se dice que se enterró a santa Eulalia en el año 303, la que sería patrona de Barcelona. En las excavaciones de 1966 se encontraron los restos de 102 personas de los siglos IV a VI. 

Fachada principal del templo


Asociado a este cementerio se construyó la capilla de Santa María de las Arenas que, en el siglo VII, se había convertido en  iglesia parroquial y ya se le daba el nombre de Santa María del Mar. La denominación de las “Arenas” viene del hecho de que se levantaba sobre un arenal delante del mar, pues esta zona era el límite de la costa en esta época. Otra versión nos la da Jordina Sales: las “Arenas” se debería a que la basílica se construyó sobre las ruinas de un anfiteatro romano y no sobre los restos de un templo altomedieval; unos arcos frente a la entrada principal avalarían esta tesis.


EL BARRIO DE LA RIBERA ERA EL MOTOR ECONÓMICO DE BARCELONA. En el siglo XII Barcelona era una gran ciudad. La población ya no cabía dentro de las murallas y la frontera con los musulmanes estaba mucho más al sur, lo suficientemente alejada para que no hubiera que temer peligro alguno. Se crearon una serie de barrios fuera de la muralla, uno de los cuales fue el de Vilanova del Mar, que creció en torno a la iglesia de Santa María de las Arenas. 

Vilanova del Mar (posteriormente conocido como La Ribera) experimentó un rápido e importante crecimiento gracias al comercio marítimo de la zona. Era un barrio de pescadores, estibadores, mercaderes y artesanos, con sus gremios respectivos, que vivían en una economía floreciente. Muchas familias podían mantener un nivel de vida con un cierto desahogo. La bonanza económica del lugar atrajo a varios nobles barceloneses, que se instalaron sobre todo a lo largo de la calle Montcada en varios palacios de estilo gótico civil catalán. El barrio de La Ribera se convirtió en uno de los motores económicos de Barcelona. La ciudad tenían entonces más de 40.000 habitantes.

Barcelona siglo XV. La flecha señala el edificio que sería Santa María del Mar (fuente: xtec.cat)

LA GENTE DE LA RIBERA DECIDE CONSTRUIR UNA CATEDRAL. La iglesia de Santa María de las Arenas se había quedado demasiado pequeña. Había que construir un nuevo templo. Es entonces cuando los habitantes de este barrio decidieron tener su propia catedral, una "catedral del pueblo" como se la ha conocido posteriormente, en contraste con  la otra catedral que las clases dominantes estaban construyendo en el interior de la ciudad.

Las lápidas del portal de les Moreres atestiguan el comienzo de las obras en 1329. Se conoce el contrato entre los obreros y los maestros Ramon Despuig y Berenguer de Montagut, donde se establece que el templo habría de pertenecer a los habitantes de la zona del puerto y la Ribera, que serían quienes financiarían las obras o participarían gratuitamente en los trabajos de construcción. Berenguer de Montagut fue quien diseñó la obra y Ramon Despuig quien la dirigió. Guillem Metge fue quien terminó los trabajos. Toda la población del barrio de la Ribera participó en las obras. Esto explica que el templo se levantase en tan sólo 55 años.

Maqueta de Santa María del Mar, que se expone en el propio templo


LOS "BASTAIXOS" TRANSPORTARON GRANDES PIEDRAS SOBRE SUS ESPALDAS. Destaca la figura de los “bastaixos”, descargadores del muelle, que transportaron sobre sus espaldas enormes piedras desde la cantera de Montjuic y que luego traían en barca hasta las inmediaciones del lugar de la obra. Los “bastaixos” debían compaginar la traída de piedras de Montjuic con su trabajo habitual de llevar las mercaderías desde los barcos a tierra para que la actividad comercial de la ciudad no se viera afectada. Según Màrius Vendrell “son piedras escogidas, duras y resistentes. Su estado de conservación es excelente. Su acabado irregular no es por la alteración, sino por el trabajo de los picapedreros, y es la misma superficie que pudo ver Montagut en el siglo XIV”. Más del 99% de la piedra empleada es roca arenisca silícea de Montjuic. El gremio de los “bastaixos” recibió algunos privilegios por el trabajo realizado; en la portada principal de Santa María se hace un homenaje a estos “bastaixos” y a su decisivo papel en la construcción de la basílica. 


Vista aérea (foto: xtec.cat)

LA PESTE NEGRA, 1348. MURIÓ LA MITAD DE LA POBLACIÓN. En 1346 ya se celebraba la primera misa. Dos años más tarde, un barco genovés trajo la peste negra a la Ciudad Condal, que comenzó extendiéndose por el barrio de La Ribera. Las obras se interrumpieron. Los cementerios no daban abasto y se abrieron varias fosas comunes, muriendo la mitad de los habitantes de Barcelona. Se hizo una gran procesión que partía de la catedral de la ciudad hasta el templo de Santa María del Mar para pedir el auxilio divino. Cuando pasó la epidemia, se reanudaron las obras, pero de nuevo la peste asoló a los barceloneses en 1362.


UN INCENDIO Y UN TERREMOTO. En 1379, cuando faltaban pocos años para la finalización de las obras, un potente incendio se propagó aprovechando los andamios de madera, poniendo en peligro todo el trabajo realizado.

En 1428 un terremoto derribó el rosetón y una treintena de  personas murieron aplastadas. Se construyó uno nuevo en estilo flamígero, que quedó acabado al año siguiente.

El rosetón del siglo XV


REFORMAS A LO LARGO DE LOS SIGLOS. En siglos posteriores se hicieron varias reformas. A finales del siglo XVII se construyó un pasadizo que conectaba la iglesia con el palacio del virrey. También se levantó la llamada Tribuna Real.

En plena Guerra de Sucesión, en 1708, aquí se casaron el pretendiente archiduque Carlos de Austria con  Isabel Cristina de Brunswick. En 1714 Santa María, en el marco de esta guerra, fue bombardeada por las tropas felipistas.

En 1783 se inauguró un nuevo altar mayor en estilo tardo-barroco.


EL INCENDIO EN LA GUERRA CIVIL, 1936. En 1931, con la II República, Santa María del Mar fue declarada Monumento Histórico-Artístico.

En 1936, al comienzo de la guerra civil, el templo fue incendiado, siendo pasto de las llamas muchos elementos de la decoración interior, como tallas, retablos, pinturas… El gobierno de la Generalitat tapó las calles de acceso, excepto la del Borne, para evitar males mayores.

De 2006 a 2013 se realizaron una serie de obras que dejaron a la basílica en el estado magnífico en que hoy la podemos contemplar.


Detalle del interior

EL NOMBRE DE "SANTA MARÍA". La advocación a Santa María puede ser debida a dos razones. Una de ellas es que Santa María es la patrona de los marineros. La otra, que Jaime I había prometido dedicarle una catedral a la Virgen si conquistaba Mallorca; como el rey murió sin haber cumplido su promesa se le dio el nombre a la catedral de La Ribera, que estaba en construcción.


ORIENTACIÓN DEL TEMPLO. La orientación de Santa María del Mar es de 30º, lo que hace suponer que el templo altomedieval sobre el que se levanta estaría orientado en la perpendicular, es decir, a 120º, a la salida del sol en el solsticio de invierno.